
Laceraciones faciales (cortes), contusiones (moretones) y abrasión (rasguños)
Los fragmentos de vidrio y los trozos de metal y plástico afilados rotos pueden cortar profundamente la cara. Los airbags pueden causar quemaduras en el cuero cabelludo y la cara.
Fracturas en las piernas, brazos, muñecas y manos
La fuerza del impacto puede hundir la puerta del lado del conductor. Dependiendo de su ubicación, el hundimiento puede fracturar fácilmente las piernas, brazos, muñecas y manos del conductor.
Músculos, ligamentos y tendones esguinzados y desgarrados – el efecto de latigazo
Los músculos, ligamentos y tendones se pueden estirar mucho más allá de su límite natural. Los impactos más severos pueden resultar en su desgarro, especialmente en el área del cuello y los hombros. El sacudimiento y estiramiento no natural del cuello y los hombros de lado a lado y hacia adelante y hacia atrás es comparable al efecto de un látigo. Esta lesión se conoce comúnmente como latigazo cervical.
Desplazamiento de cadera y hombro, fracturas de costillas y clavículas (huesos del cuello)
La articulación de la cadera a menudo recibe el impacto de la puerta central. La articulación es susceptible a la luxación y fractura de la cavidad. El impacto puede girar violentamente los hombros más allá de su radio máximo previsto.
Debido a que la caja torácica se encuentra cerca de la parte externa del área del pecho, es muy vulnerable a golpear la manija de la puerta, el columna de dirección y el volante. Los huesos claviculares entre el área del cuello y los hombros son algunos de los huesos más débiles del cuerpo humano, por lo que se fracturan fácilmente.
Discos herniados y compresión espinal
Las lesiones en la espalda son bastante comunes en los impactos del lado del conductor. La fuerza del impacto puede romper los discos ubicados en y alrededor del cordón espinal, lo que a menudo resulta en una hernia de disco. La compresión de la espalda hacia abajo en el asiento ejerce una tremenda presión sobre el cordón espinal.
Órganos internos
Un choque puede arrancar los órganos internos del cuerpo de los vasos sanguíneos importantes. Los objetos afilados como las manijas de la puerta y el volante pueden lacerar el bazo, el hígado y los riñones.
Tímpanos perforados
Cuando el automóvil no tiene airbags laterales, un impacto lateral puede forzar el oído del conductor contra la ventana y aplastar la carne externa. Cuando se despliega un airbag lateral, explota hacia afuera contra la cara y el oído del conductor. La magnitud de la fuerza puede perforar, quemar y lacerar el tímpano. El tinnitus (zumbido doloroso o molesto en el oído) también puede resultar del despliegue del airbag lateral.
Tronco encefálico y cordón espinal severamente contusionados y cortados
El cordón espinal humano se conecta al tronco encefálico. Un impacto violento puede contusionar severamente ambos. En algunos casos, cuando el impacto es lo suficientemente fuerte, secciona el cordón espinal, lo que resulta en parálisis o muerte.
Conmociones cerebrales, fracturas de cráneo y otros daños cerebrales graves
En un impacto lateral, la cabeza del conductor puede golpear el marco del vehículo o la ventana, lo que provoca que el cerebro golpee el interior del cráneo. Dependiendo de la fuerza del impacto, el conductor puede sufrir desde una conmoción leve hasta una fractura de cráneo y daños cerebrales.